Proceso de cambio de género

El proceso de cambio de género es un término que se refiere a los procedimientos quirúrgicos mediante los cuales se modifican los genitales por nacimiento de una persona para que sean como los del género con el que el paciente se identifica. Esta cirugía suele realizarse a personas transgénero  que optan a ella como parte de su confirmación de sexo y también se realiza en casos de intersexualidad. El proceso se conoce como cirugía de reasignación sexual o cirugía de reasignación de género. Según el género del paciente, también se denomina faloplastia (usado para hombres transgénero) o vaginoplastia (usado para mujeres transgénero).

Faloplastia

La faloplastia es la técnica quirúrgica que permite la reconstrucción de un pene de dimensiones anatómicas. Para conseguirlo se utiliza tejido de otras partes del cuerpo, comúnmente piel y grasa del antebrazo, aunque también se puede utilizar tejido del muslo o del abdomen. Este nuevo miembro presenta un aspecto fisiológico, permite orinar y presenta sensibilidad táctil y erógena. Es importante aclarar que para permitir la penetración sexual precisará de una prótesis que deberá ser implantada en una segunda operación.

Preoperatorio

Antes de someterse a la intervención es necesario realizar un tratamiento hormonal que consiga aumentar el tamaño del clítoris.

Es recomendable depilar la cara interna del antebrazo, ya que esta zona formará parte de la uretra del nuevo pene.

Operación

Esta técnica se realiza siempre bajo anestesia general y suele durar de 10 a 12 horas. La faloplastia utiliza tejido de otras partes del cuerpo para recrear un pene de dimensiones anatómicas que, una vez modelado, será transportado a su posición final donde se procederá, a la sutura de las arterias y venas, que le aportarán la sangre, y los nervios, que le permitirán tener sensibilidad. La sensibilidad se consigue gracias a un nervio del clítoris que se empalmará a uno de los nervios del pene y, paralelamente, al propio clítoris que permanecerá enterrado debajo del propio pene.

Para prolongar la uretra en los primeros centímetros, el cirujano utilizará un injerto de la pared de la vagina y un colgajo con la piel del labio menor. Después se suturará con la uretra.

Durante la intervención, los labios mayores son movilizados y unidos para formar un nuevo escroto. Una vez realizada la bolsa escrotal, se colocan implantes testiculares de siliconas. La implantación de las prótesis testiculares se puede realizar durante la operación o ser pospuesta a una segunda intervención.

Vaginoplastia

Vaginoplastia por inversión peneana

La vaginoplastia consiste en realizar una vagina mediante la piel invertida del pene y del escroto. El objetivo es crear un genital femenino desde un punto de vista anatómico, estético y funcional.

La vagina reconstruida tiene unas dimensiones variables que están en función de tres características de la paciente: el tamaño del pene, la elasticidad de la piel y la altura de la paciente, que determina la cavidad para alojar la vagina.

Preoperatorio

La paciente deberá abandonar la hormonación unas 4 semanas antes de la intervención, ya que los estrógenos en sangre aumentan el riesgo de padecer una trombosis venosa profunda (coágulos de sangre en el interior de las venas) con los riesgos y problemas que esto puede ocasionar.

La paciente ingresará un día antes de la intervención en el centro hospitalario. A lo largo de ese día, se le realizarán los controles pertinentes y una limpieza de colon (intestino grueso) con la toma de laxantes y preparados antibióticos, ya que durante la cirugía éste queda expuesto a ser lesionado y es preferible que esté limpio y lo más libre de bacterias posible. 

Operación:

La intervención suele durar entre 3 y 5 horas. Por norma general, se opera bajo anestesia general.

La operación se inicia abriendo el pene con un corte en la línea media. Parte del glande se usará para formar el clítoris, mientras que la mayor parte de la piel del pene es recolocada para formar las paredes vaginales. El resto de los elementos del pene que comprenden los cuerpos cavernosos y parte de la uretra son eliminados.

La uretra es acortada y se redirige hacia su posición normal. El exceso de tejido de alrededor de la uretra se elimina en parte para evitar que aumente de tamaño durante la excitación sexual y pueda así impedir la correcta apertura de la vagina. En los casos en que es posible se utiliza una buena parte de la uretra para forrar los labios menores dándole así una apariencia más semejante a la vulva femenina.

Los cordones espermáticos son seccionados y los testículos, eliminados, aunque la piel del escroto se usará para formar los labios mayores y menores.

El espacio donde se situará la vagina se encuentra entre la vejiga y el recto. Esta es la parte más compleja, pues existe el riesgo de perforar el intestino.

Una vez formado el espacio donde se localizará la vagina, se colocará la piel del pene invertida formando así las paredes vaginales.

La siguiente fase de la cirugía consiste en reconstruir el clítoris con la porción de glande que se ha conservado junto con sus nervios y vasos sanguíneos con el objetivo de mantener la sensibilidad y la capacidad de una satisfacción sexual plena. El clítoris se fijará por encima del meato uretral y se realizará un capuchón que lo cubrirá.

Vaginoplastia por trasplante rectosigmoidal pediculado (colovaginoplastia)

La colovaginoplastia un procedimiento quirúrgico que consiste en utilizar una sección del intestino grueso terminal para recrear una vagina.

Preoperatorio

La paciente deberá abandonar la hormonación unas 4 semanas antes de la intervención, ya que los estrógenos en sangre aumentan el riesgo de padecer una trombosis venosa profunda (coágulos de sangre en el interior de las venas) con los riesgos y problemas que esto puede ocasionar.

La paciente ingresará un día antes de la intervención en el centro hospitalario. A lo largo de ese día, se le realizarán los controles pertinentes y una limpieza de colon (intestino grueso) con la toma de laxantes y preparados antibióticos, ya que durante la cirugía éste queda expuesto a ser lesionado y es preferible que esté limpio y lo más libre de bacterias posible. 

Operación

La intervención suele durar entre 5 y 6 horas. Siempre se realiza bajo anestesia general.

El cirujano labra un túnel desde el periné hasta el peritoneo, donde se forjará la vagina. Posteriormente, se realiza una incisión de Pfannenstiel (la misma que se utiliza durante una cesárea, pero desviada hacia la izquierda) en el abdomen, lo que permite que el cirujano pueda intervenir en la cavidad abdominal. Se separa y seccionan de 18 a 20 centímetros de colon, provisto de un pedículo vascular, y se desplaza hacia la zona del periné, donde se había creado el túnel vaginal. El resto del colon seccionado se empalma para que pueda seguir realizando su función una vez haya finalizado la intervención.

El resto de la intervención se desarrolla de forma idéntica a la vaginoplastia por inversión peneana.

Como vemos, las operaciones de cambio de género son operaciones largas y complejas, que a menudo requieren de la ayuda de especialistas.